De mis 7 a los 11, todos los cumpleaños (y en cada oportunidad que se presentaba) pedía los mismos deseos:
1. Un perro
2. Una bici nueva
3. Una muñeca de mi altura (esas que medían como un metro veinte)
Aunque tuve que esperar un tiempo, finalmente conseguí el perro y la bici. Si en la vida obtengo dos terceras partes de lo que quiero, creo que tendré un buen futuro...
Lástima que hoy siendo "cuasi-adulta" ya no tengo tan claros mis deseos como en aquella época...
Qué ganas de tener 7 otra vez...
viernes, 4 de septiembre de 2009
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9 comentarios:
bueno, por lo menos ya no querés una muñeca de tu altura! (?)
y sí... qué ganas de volver a la infancia y que todo sea fácil y clarito!!!!!!!!
creo que ayer, antes de soplar la velita (eeeee, ¡no pienses así de mal!) pedí dos deseos en lugar de tres.
café: midiendo 1.67, la única muñeca de mi altura q se consigue es una inflable... asique menos mal que ya no la quiero!!!
back to the infancia!
vestida: feliz cumple de nuevo!
y yo no pensé mal... fuiste vos solita...
no soplaste ninguna "velita" después? nada mejor que un revolcón de cumpleaños!
me regalás el deseo que no usaste??
no da para que ande desperdiciado por ahí...
uff, me pasa lo mismo, no hace mucho cumplí años y tuve que soplar la velita (?) y pedir esos 3 deseos...
y tarde mucho, cada vez tardo mas, ya no se si, no se que desear porque estoy muy bien como estoy (autoconvencimiento) o porque no se que quiero, jajaja.
Siempre pienso en lo lindo que sería volver a tener siete años.
Yo siempre pido ser feliz, no sé si de estúpida, ingenua o sencilla. Y menos mal que no tenés la muñeca, qué miedo dormir con eso cerca!
menos la de la bici! pedí lo mismo en su momento!
los 7 años... la mejor edad, me acuerdo tan claramente de mis épocas de escuela en ese entonces.
un hermoso año
y lo de los cumples es tal cual, todo el mundo tiene derecho a ser feliz y nosotros a sacrificar algo por la felicidad del otro.
al menos así es como yo sé querer.
Yo cuando era chiquita pedía que todos fuesen felices y que mi abuelo reviviera. Dios mío. Igual me encantaría volver a tener cinco años.
mientras los deseos sean para bien no importa el numero...
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